de pequeño. mi abuela siempre me contaba, cada vez que sobre nuestras cabezas volaba una bandada de pájaros, que estos se dirigian todos juntos a un convite. se iban de boda. y yo, me lo creía.
hoy, mientras paseaba a mi perro al medio día, sobre mi volaban un par de bandadas en forma de flecha, dirigiéndose a algún lado.
esta vez no se iban de boda. estaban emigrando.
(illustration by Amy Ross)